
Travestis y Trans no pueden conducir en Rusia
Russia ha incorporado a las personas travestis y transgéneros dentro de una lista «no apta» para conducir.
El gobierno de Vladimir Putin sostiene que «está ajustando los controles médicos a los conductores porque Rusia tiene demasiados accidentes».
En octubre de 2014, Cristina Fernández hizo una video-conferencia con Vladimir Putin en la que ambos celebraron la incorporación del canal ruso RT a la Televisión Digital Abierta. En esa oportunidad, la mandataria dijo «Estamos logrando comunicarnos entre ambos pueblos sin intermediarios y para transmitir los valores propios». Sin dudas, estamos conociendo los valores del presidente ruso frente a la comunidad homosexual.
El vouyerismo, el exhibicionismo y el fetichismo también han sido incluídas como «desórdenes» mentales y son un impedimento para conducir. Ludópatas y cleptómanos también se encuentran en dicha lista. Los psiquiatras rusos y abogados de derechos humanos han condenado esta norma.
El anuncio viene luego de protestas internacionales acerca del acoso ruso a activistas de derechos homosexuales.
En 2013 Rusia sancionó una ley declarando ilegal «la promoción de estilos de vida no tradicionales».
Valery Evtushenko de la Asociación Rusa de Psiquiatría hizo declaraciones acerca de las restricciones a conducir, en charla con el servicio ruso de la BBC. Agregó que algunas personas podrían evitar buscar ayuda psiquiátrica por temor a que le prohiban conducir.
La Asociación de abogados rusos de derechos humanos denominó a la ley discriminatoria. Agregaron que se necesita aclaraciones de la corte constitucional rusa y buscan el apoyo internacional de organizaciones en derechos humanos.
Sin embargo, el sindicato de conductores profesionales apoyaron la iniciativa. «Tenemos demasiados muertos por accidente de tránsito, y creo que reforzar los requerimientos para los solicitantes esta totalmente justificado», dijo el líder del sindicato Alexander Kotov. Aunque agregó que los requerimientos no deberían ser tan estrictos para los conductores no-profesionales.
Mikhail Strakhov, experto psiquiatra ruso, dijo a la BBC Rusa que la definición de «desórdenes personales» era demasiado imprecisa y que algunos desórdenes no afectan las habilidades para conducir de forma segura.